Por otro lado, el mes de octubre en los mercados no ha sido negativo como se esperaba sino todo lo contrario. «El mes se ha caracterizado por una subida generalizada de todos los índices de renta variable a nivel mundial, mientras que la renta fija a largo plazo ha sufrido un pequeño retroceso.»

En nuestra opinión, «el excesivo negativismo de todos los activos financieros, descontando un entorno recesivo a nivel global durante este año, empezó a revertir en septiembre. Esta dinámica de cambio ha tenido continuidad y se ha acentuado durante el mes de octubre.»

Sobre la valoración de los diferentes activos, el documento señala que «los niveles de tipos de interés a largo plazo y los diferenciales de crédito, nos hacen pensar que la inversión en renta fija a largo plazo carece de cualquier potencial alcista sostenible.» En el caso de activo de mayor riesgo, «en el corto plazo vemos poco probable una ruptura al alza por el nivel de sobrecompra y la cercanía de una fuerte resistencia».

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